BWV 1004, para violín solo
sobrenatural. tres movimientos que me dejaron heridas: allemande, giga, ciaccona...
cómo puede este antropoide límbico, patético, ser capaz...
cómo puede este antropoide límbico, patético, ser capaz...
Si me preguntáis de donde vengo, tengo que conversar con cosas rotas, con utensilios demasiado amargos, con grandes bestias a menudo podridas y con mi acongojado corazón. (Neruda)