martes, noviembre 01, 2005

otro concierto a tu lado

Hoy curiosamente, la que me dejó más feliz no fue la música de Juan Sebastián, sino la de un contemporáneo suyo que no recuerdo haber escuchado antes, Johann Gottlieb Janitsch (Sonata da camera en Do mayor, Op. 6 para flauta, oboe, violín y bajo contínuo) y la del menor de sus hijos, Johann Christian Bach (Quinteto en Re mayor para flauta, oboe, violín, violonchelo y clavecín obligado). Esta última en particular fue cristalina, ingenua, pura, infantil. Preciosa.
Creo que el violinista de Il Gardellino no supo trasmitir la emoción o la fuerza que requerían algunas de las obras... O quizás la Sonata BWV 527 para órgano se resintió de su transcripción para flauta, violín y bajo contínuo. Sin embargo, fue un concierto bonito, con un buen final y un encore vital y feliz.
(Qué bueno tenerte a mi lado, compartiendo el milagro de la música, mirando cómo me llena y cómo a veces me humedece los ojos...)