Aca nadie que conozca (la imbécil espero que ya no lo haga, y Salida no creo que haya vuelto) me lee. Acá escribo para mí mismo. En FB no es que realmente escriba, pero me comparto, le doy a otros una muestra, un pedazo, un rastro de mí mismo. Y casi nadie lo siente. Pero ahí están, así sea para confirmar la casi precisa inutilidad del ejercicio.
Eso consume el impulso que me traía acá. No la finalidad formal, porque lo de este blog es de otro ámbito, sino... el esculpirse o dejar rastro, virtualmente.
Esa es una explicación.
La otra es... la dejadez, el abandono que me consume.
La otra es la ausencia de sustancia, aunque... muchas veces venía a encontrarla.
Otra: muchas cosas (el cine, los libros, las noticias, las imágenes) es más sencillo dejarlas en FB.
Pero mientras escribo sé que hay cosas mías para las cuáles este es su lugar.
Privado.
Soy acá, más que en ninguna otra parte, el que habla consigo mismo... y sus verguenzas. Y todo eso que más que los rasgos, nos definen: los vacíos, las tristezas, los cansancios...
No quiero rendirme a mí mismo.
Eso consume el impulso que me traía acá. No la finalidad formal, porque lo de este blog es de otro ámbito, sino... el esculpirse o dejar rastro, virtualmente.
Esa es una explicación.
La otra es... la dejadez, el abandono que me consume.
La otra es la ausencia de sustancia, aunque... muchas veces venía a encontrarla.
Otra: muchas cosas (el cine, los libros, las noticias, las imágenes) es más sencillo dejarlas en FB.
Pero mientras escribo sé que hay cosas mías para las cuáles este es su lugar.
Privado.
Soy acá, más que en ninguna otra parte, el que habla consigo mismo... y sus verguenzas. Y todo eso que más que los rasgos, nos definen: los vacíos, las tristezas, los cansancios...
No quiero rendirme a mí mismo.